Crónica: Maratón de París

El domingo nos recibió con un gran dia a pleno sol y temperatura ideal para correr el maratón de París, una fiesta del atletismo nada mas y nada menos que con 50.000 invitados de todas partes del mundo.
Se venia mi septima
Maratón, la que había pensado y soñado hacía 10 años atras, hacer una
Maratón Internacional, ahí estaba frente al arco de largada y en mi espalda el arco del triunfo. Solo me dediqué a disfrutar
segundo a segundo antes de largar y festejar los 10 anos corriendo.
Elegir Paris fue acertado, se combina una gran organización y una gran fiesta la para los corredores y para todos los parisinos, que estaban desde los primeros metros a ambos lados, tras las
vallas, alentandonos a todos con su "allez! allez!" y extendiendo sus manos para chocar los 5. Asi se repetía kilómetro a kilómetro durante casi todo el recorrido. La gente
lo vive como una fiesta en la ciudad del amor. Abuelos padres e
hijos, todos alentando, no lo podía creer.
Tal era el grado de emoción a medida que iba avanzando, que no pude evitar que algunas lágrimas
recorriera mis rostro y dejarlas ahi junto a esa gente que no paraba de
gritar.
Se me pasaban los kilómetros muy rápido, tanto que entre el disfrute de los lugares increibles y el espectáculo de la gente, sin darme cuenta, de repente, me encontré
en el kilómetro 30 junta a ella, esa gran torre que transmite y te llena de una
gran energía, sí, la gran torre Eiffel!
Solo restaban 12 kilómetros y empecé a
despertar y ver que el sueño ya era no sólo realidad sino que en breve
se terminaba, venia con un lindo ritmo el del disfrute y muy cómodo,
pero al llegar al 35 dije "no quiero llegar, no quiero que se termine
esta maratón".
Estaba en una gran fiesta con runners de todo el mundo, con los franceses copando las calles y puentes a puro aliento para
nosotros los corredores, era mi fiesta, la soñada, y yo estaba ahi!! fue
en ese momento que empece a bajar el ritmo cada kilómetro mas para poder disfrutar de
la maravillosa Maratón de París, hasta encontrar y sorprenderme con el
km 40 marcado, nunca en mis 6 maratones anteriores lo había encontrado marcado.
Y ahi lo vi, verde y gigante, el arco de llegada. Solo restaban esos 195 metros finales. Se
terminaba mi septima maratón, la primera internacional. En segundos, pasaron por mi mente los diez años trotando, mis hijos, mis viejos, mi hermano y ella, la que siempre
estuvo en cada arco de llegada, la mujer de mi vida...
Llegó el momento de
cruzarlo ahi estaban ellos mis corredores junto a mi, llegué! Estando justo
debajo del arco, me arrodillé, agredecí y se vino el gran abrazo de trotador en arco de Llegada pero esta vez fue solo entre él y yo... con Dios.
Agradezco de Corazon a todos los que mandaron mensajes tanto por las redes sociales
como por celular y estuvieron pendientes antes, durante y después del
maratón. Se cumplió y terminó un gran sueño, pero ya comencé a soñar
otros.
#Simplemente los años pasan pero no logran vencer a la pasión por correr que cada dia es mayor!
Excelente y emocionante relato Pepe, felicitaciones por tu medalla de finisher que siempre llevaras con legítimo orgullo de maratonista. Tu relato me hizo revivir mi inolvidable participación en la maratón de Paris el Domingo 15 de abril de 2012.
ResponderEliminar#Simplemente emocionante, te leo una y otra vez y recuerdo la emocion de llegar a cada arco desp de una carrera de 10kmts y redimensiono esa emocion a la tuya. Te mereces esto y mucho mas. Es un orgullo que seas mi entrenador, porque sos un GRANDE.. un gigante por lo que logras, por lo que nos transmitis y por lo que sos.. Segui asi.. dandonos todo de vos. Se te quiere y admira!
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